domingo, 22 de enero de 2012

Exilio ¿voluntario?

A Gabi, que también busca

Ya no hay lugar posible a donde escapar. El poder con sus tentáculos invisibles ha penetrado hasta las partículas del alma. ¿A dónde huir compañeros de la aventura humana? ¿Dónde podremos refugiarnos de la lluvia de podredumbre que nos ahoga cada vez más? Si el mundo con sus fronteras absurdas es ya uno solo, pero moldeado a imagen y semejanza del poderoso capital. Si hasta en los países que se llaman ricos se expulsa a sus propios hijos, ¿qué esperar del trato que reciben los “intrusos” buscadores de sueños?

El poder busca solo a los elegidos para apuntalar más su sistema de expolio. Tanto es así que en Brasil, la llegada en los últimos años de 4 mil haitianos huidos de la ruina del país es considerada como una “ola de inmigración”. Mientras, en los últimos 3 años, 87 mil españoles “cualificados” huidos de la crisis fueron recibidos con la alfombra roja. El sistema, al igual que los dioses, condena a los pecadores de la pobreza y absuelve a los santos conquistadores de la riqueza.Y si bien

jueves, 19 de enero de 2012

“Para construir un nuevo mundo hay que tener capacidad de delirio y vocación subversiva”

Entrevista a Vicente Zito Lema poeta, periodista, docente, militante de derechos humanos

Eduardo Galeano cuenta en su libro “Días y noches de amor y de guerra” cuando Vicente dijo un discurso el último día de la huelga de hambre por los presos políticos, allá en el año 1971: “Vicente se alzó en las tribunas y más allá de la multitud vio a su mujer y a sus hijas jugando en el prado con las vacas y los perros, entonces se olvidó de las consignas políticas y se lanzó a hablar del amor y la belleza. Desde abajo le tiraban del saco, pero no había manera de pararlo”. Y todavía no hay manera. Vicente Zito Lema (Buenos Aires, 1939) es uno de los protagonistas y supervivientes de una generación que vivió una de las etapas más trágicas y heroicas de la historia reciente de Argentina. Empezó a escribir desde muy joven para encontrar la belleza y a la vez, estudió derecho para luchar contra la injusticia social. Para él, “sin justicia y sin belleza no se construye el mundo”. Sin embargo, sus inicios en esa búsqueda de justicia, fueron trágicos. En una charla de la universidad en la que se encontraba la madre del Che, aparecieron fuerzas para-policiales y dispararon a mansalva. Algunos de los allí presentes cubrieron con sus cuerpos a la Madre del Che. El recibió dos balazos en una pierna y su compañera Malena cayó

miércoles, 18 de enero de 2012

El “Argentinazo” y sus consecuencias visto por destacados militantes políticos y de derechos humanos

Destacados militantes políticos y de derechos humanos hablan sobre el Argentinazo y sus consecuencias a 10 años de su conmemoración. Reflexiones de Nora Cortiñas cofundadora de la Asociación Madres de Plaza de Mayo, Línea Fundadora. Vicente Zito Lema poeta, periodista y militante de los derechos humanos, en el exilio conformó junto a Julio Cortázar y David Viñas la Comisión Argentina por los Derechos Humanos CADHU. Luis D'Elía es uno de los principales dirigentes del Movimiento Piquetero, lidera la Federación de Tierra, Vivienda y Hábitat perteneciente a la CTA (Central de los Trabajadores Argentinos). Rubén Saboulard es coordinador del Movimiento Asambleas del Pueblo. Pancho Montiel es dirigente del Movimiento Estibadores Portuarios de Pie. Roberto Perdía es ex-dirigente de la Organización Montoneros y actual líder de la Organización Libres del Pueblo (OLP).

El 19 de diciembre de 2001, bajo el lema “que se vayan todos”, los argentinos se echaron a las calles para protestar contra las asfixiantes políticas que habían sumido en un abismo a la inmensa mayoría del pueblo. Días antes habían sufrido la confiscación de sus ahorros con el llamado “corralito”, que afectó sobre todo a la clase media y desató una ola de indignación ciudadana que sacudió a la clase política. Cinco presidentes fueron tumbados en trece días a costa de 39 personas asesinadas (nueve menores de edad) por las fuerzas de seguridad del estado. La sociedad argentina empezaba a mirarse desnuda de

domingo, 15 de enero de 2012

Conversaciones con Ñora II (El oficio y otras reflexiones)

–Lo suyo ya no tiene nombre –me suelta Ñora sin venir a cuento.

Como la conozco de sobra cuando habla en ese tono me levanto de la silla para hacerle frente.

–Me refiero al hecho del blog, de ese estilo plagiado y de ese sobrenombre que no tiene nombre –continúa–. Lo suyo es no tener vergüenza –remata algo enojada y se sienta.

Le digo que vayamos por partes y la llamo Ñorita como para apaciguar los ánimos y marcar un poco la cancha. Le cuento que lo del blog va para los 3 años y que lo uso solo para mantener la mano caliente.

–A otra vaya a meterle ese cuento chino –me interrumpe y contraataca–. De sobra es conocido que todos los artistas, escritores y periodistas son unos narcisistas, egocéntricos, soberbios e

martes, 10 de enero de 2012

Conversaciones con Ñora I (La aparición)

La primera vez que Ñora entró en mi vida yo tenía unos 15 años. Llegó como una tempestad y se fue de la misma forma. Con el tiempo me acostumbré a su llegada inesperada. A veces, se quedaba largo tiempo, otras (las más) se evaporaba como el humo del cigarrillo. Siempre entraba sin tocar la puerta, intempestuosa como ella sola, se sentaba de cara a la luz de la ventana y se quedaba mirándome fijamente a los ojos, entonces no había escapatoria. Se introducía en todos los rincones del alma y palpaba las paredes del sentimiento como el minero en busca del metal.

Había noches que no me dejaba dormir y a pesar de mi ruego continuaba con su taladro de preguntas. A veces, yo la mandaba al carajo, otras tantas, ella hacía lo mismo conmigo. Casi siempre buscaba los momentos de soledad para incordiarme, aunque de un tiempo acá, no respeta ni cuando estoy acompañado. Eso me ha cambiado, en parte por ella, claro está, porque como dice el dicho, la costumbre se vuelve necesidad. Y ahora es para mi como la mala amante, no puedo vivir con ella pero sin ella tampoco. Aprovecho para escribir esto porque está dormida, en otro post ya transcribiré nuestras conversaciones, si a ella le da la gana, claro.

domingo, 8 de enero de 2012

El oro

Cuando José Arcadio Buendía descubrió la fórmula para transmutar los metales en oro y mostró a su hijo el resultado de su experimento, éste le dijo: "parece mierda de perro".
Otto, un adolescente anarquista de ochenta años que recorrió el mundo una vez y media, cuenta que cuando anduvo por Quito, un amigo suyo y él, entraban a las cloacas: "no sabés la cantidad de joyas de oro que encontrábamos", me dice.
Los niños, al parecer, al igual que el hijo del patriarca de la familia Buendía, confundían el oro con la mierda y la depositaban en el único lugar que corresponde: la taza del baño.